Hola a todos
A partir de esta edición en adelante vamos a conocer diferentes Fishroom de compañeros y amigos de Tanganyika-Cichlids Magazine, por supuesto serán Fishroom dedicados exclusivamente al lago Tanganyika. Pero!! también queremos que participéis, así que si tienes un Fishroom y quieres que lo publiquemos en el Magazine, mándanos un email a tanganyikamagazine@gmail.com
Empezamos con el primer Fishroom...
A partir de esta edición en adelante vamos a conocer diferentes Fishroom de compañeros y amigos de Tanganyika-Cichlids Magazine, por supuesto serán Fishroom dedicados exclusivamente al lago Tanganyika. Pero!! también queremos que participéis, así que si tienes un Fishroom y quieres que lo publiquemos en el Magazine, mándanos un email a tanganyikamagazine@gmail.com
Empezamos con el primer Fishroom...
Me llamo Juan, tengo 31 años, soy de Tarragona y con estas líneas espero me conozcáis un poco más,...
Siempre he sentido curiosidad por el mundo acuático. Siendo muy pequeño, mis padres me regalaron un pequeño acuario en el que mantenía todo tipo de bichos; desde los típicos peces ornamentales que compraba en la tienda de mi barrio, hasta cangrejos de río, Gambusia, renacuajos y otros pequeños seres indefensos que capturaba en las salidas al campo que hacía con mi padre. De hecho, el nick que uso en Internet es en su honor. Fue el Sr. Menuo el que me enseñó a respetar el medio natural.
Más tarde, me hice con un acuario un poco más grande. Apareció internet y aquí fue cuando se
abrió un mundo nuevo para mí y en el que descubrí un mar de agua dulce en el centro de África. Quedé enamorado del Tanganyika y sus maravillas evolutivas. Es más, si Darwin hubiese dado con él, hubiera quedado prendado sin duda alguna.
De esto habrán pasado ya unos cinco años más o menos y es el tiempo que he tardado en poder tener un lugar completamente dedicado a mis peces para que puedan estar como merecen. Es una habitación con unos diez metros cuadrados en la que paso la mayor parte de mi tiempo libre y tengo destinada a los acuarios (seis en la actualidad).
De esos seis acuarios, tengo dos más grandes; con 120x40 y 120x50 dedicado a arenícolas y otros dos medianos 80x40 y 80x35 con conchícolas y pequeños lamprologuinos, un 60x30 con más conchícolas y un pequeño gambario con el que estoy empezando a experimentar otras ramas de la acuarofilia.
También decir que mi manera de llevar la afición ha cambiado bastante desde un tiempo a esta parte y no me canso de repetir que lo que más nos gusta a nosotros no es lo más apropiado para nuestros peces y debemos esforzarnos al máximo en intentar ofrecerles un hueco en el acuario lo más parecido a su hábitat, pues su evolución no es cosa de dos días ni caprichos naturales que podamos modificar o alterar por gusto personal o en el peor de los casos por torpeza o ignorancia. Es hora de cambiar el chip y dejar de rellenar capas del acuario o combinar colores porque están de moda. Recomiendo acuarios con pocas especies y de un mismo nicho natural. Esto no solo hará que disfrutemos más de nuestros peces y sus comportamientos naturales, sino que tendremos un trocito de naturaleza en casa la más parecido a la realidad.
Y poco más, me considero una persona amante de la naturaleza e intento respetarla y aprender de ella al máximo.
Siempre he sentido curiosidad por el mundo acuático. Siendo muy pequeño, mis padres me regalaron un pequeño acuario en el que mantenía todo tipo de bichos; desde los típicos peces ornamentales que compraba en la tienda de mi barrio, hasta cangrejos de río, Gambusia, renacuajos y otros pequeños seres indefensos que capturaba en las salidas al campo que hacía con mi padre. De hecho, el nick que uso en Internet es en su honor. Fue el Sr. Menuo el que me enseñó a respetar el medio natural.
Más tarde, me hice con un acuario un poco más grande. Apareció internet y aquí fue cuando se
abrió un mundo nuevo para mí y en el que descubrí un mar de agua dulce en el centro de África. Quedé enamorado del Tanganyika y sus maravillas evolutivas. Es más, si Darwin hubiese dado con él, hubiera quedado prendado sin duda alguna.De esto habrán pasado ya unos cinco años más o menos y es el tiempo que he tardado en poder tener un lugar completamente dedicado a mis peces para que puedan estar como merecen. Es una habitación con unos diez metros cuadrados en la que paso la mayor parte de mi tiempo libre y tengo destinada a los acuarios (seis en la actualidad).
De esos seis acuarios, tengo dos más grandes; con 120x40 y 120x50 dedicado a arenícolas y otros dos medianos 80x40 y 80x35 con conchícolas y pequeños lamprologuinos, un 60x30 con más conchícolas y un pequeño gambario con el que estoy empezando a experimentar otras ramas de la acuarofilia.
También decir que mi manera de llevar la afición ha cambiado bastante desde un tiempo a esta parte y no me canso de repetir que lo que más nos gusta a nosotros no es lo más apropiado para nuestros peces y debemos esforzarnos al máximo en intentar ofrecerles un hueco en el acuario lo más parecido a su hábitat, pues su evolución no es cosa de dos días ni caprichos naturales que podamos modificar o alterar por gusto personal o en el peor de los casos por torpeza o ignorancia. Es hora de cambiar el chip y dejar de rellenar capas del acuario o combinar colores porque están de moda. Recomiendo acuarios con pocas especies y de un mismo nicho natural. Esto no solo hará que disfrutemos más de nuestros peces y sus comportamientos naturales, sino que tendremos un trocito de naturaleza en casa la más parecido a la realidad.
Y poco más, me considero una persona amante de la naturaleza e intento respetarla y aprender de ella al máximo.
Fishroom: Juan Arjona (Menuito)
Fotografía: Juan Arjona
Vídeo y montaje: Juan Arjona y Miguel Mora.
EnjoyingTanganyika
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